El compromiso de la Diputación Provincial de Castellón por garantizar la depuración de aguas en todos los municipios de la provincia a través de la construcción de 98 depuradoras y colectores se ha materializado esta semana con la inauguración de la nueva estación depuradora del Castillo de Villamalefa. Con esta nueva instalación, a cargo de FACSA y que ha supuesto una inversión provincial de 151.426 euros, el Gobierno Provincial ya presta servicio de depuración de aguas residuales a un total de 94 municipios de la provincia de los 116 pueblos que hay de menos de 5.000 habitantes.
El presidente de la Diputación Provincial aseguró que “estas actuaciones son esas obras que no se ven, no están en el casco urbano, no llaman la atención, pero igualan las oportunidades de la gente que vive en un pueblo respecto de los que viven en una capital, y sobre todo minimizan el impacto de la vida humana respecto del entorno en el que vivimos”.
Es precisamente en ese valor medioambiental que se suma al programa Repoblem de la Diputación al que hizo especial hincapié Moliner al explicar que “en un entorno natural como este, en el Alto Mijares, en un lugar con un gran valor paisajístico, es fundamental que cada día estemos más concienciados de que nuestra presencia no puede afectar al entorno, y con la puesta en marcha de esta estación depuradora conseguimos ese efecto y el de que los ciudadanos que deciden vivir aquí lo hacen sabiendo que su presencia no va a afectar a todo el entorno natural que les rodea”.
Hay que tener en cuenta que este servicio que se presta a nivel provincial emplea a más de 90 personas con carácter de continuidad, distribuidas por toda la provincia de Castellón, que junto con el personal del Área Técnica de la Diputación, son las encargadas de llevar a cabo las labores de explotación y mantenimiento de las instalaciones.
Balance de 2017 en 93 municipios
El balance de actividad de las instalaciones de depuración durante 2017 da buena muestra del buen funcionamiento de estas instalaciones a favor de los municipios. Así, 93 núcleos de población menores de 5.000 habitantes se beneficiaron del completo tratamiento de sus aguas residuales que fueron devueltas a los cauces receptores en condiciones adecuadas con el consiguiente beneficio medioambiental para la provincia. Supuso dar servicio a más de 72.500 habitantes y depurar un caudal total de 6,080,000 litros.
Consecuencia de dicha depuración se produjeron 4.700 toneladas de fango con una cualidades agronómicas excepcionales y que se aplicaron al 100% en agricultura como fertilizante en más de 1248 hectáreas.