El hotel Intur de Castelló acogió ayer el III Foro del Agua de Castellón, un evento organizado por el periódico Mediterráneo con el patrocinio de FACSA. La temática de la presente edición giró en torno a ‘Las palancas de la recuperación: sostenibilidad, eficiencia, agua, digitalización y colaboración público-privada’.
Los encargados de abrir la jornada fueron el president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, y la alcaldesa de la ciudad, Amparo Marco.
En su intervención, Puig aseguró que “el agua no es solo un activo estratégico para la industria, el turismo o la agricultura, y más en zonas de déficit”, para aseverar que “tiene que ser entendida como política de Estado”, en cuyo debate “no puede haber vencedores ni vencidos, porque perdemos todos”.
También solicitó una “respuesta global” y urgente para el “reto medioambiental”, que tiene los recursos hídricos en el eje, planteada “desde lo local” pero ejecutada de forma conjunta por todos los niveles de las administraciones públicas y con el complemento necesario de la colaboración público-privada. Una respuesta que, en términos de gestión del agua debe ser “colaborativa, sostenible, integradora, incrementativa, y vertebradora” que se traduzca en el “saneamiento, correcta gestión del agua, y nuevos modelos de economía circular”.
En esta línea, el president detalló las claves de la estrategia hídrica de la Generalitat, que desgranó en puntos como la digitalización de la gestión del agua; la eficiencia energética; la modificación de los procedimientos de licitación, incluyendo el requisito de innovación tecnológica; y la incorporación de microempresas y pymes locales en el tratamiento del agua.
Por su parte, la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, situó el Plan General como una herramienta clave para la gestión sostenible del agua. Y es que “el nuevo planeamiento urbanístico prevé medidas de ahorro que pasan por sistemas más eficientes de suministro, reducción de fugas o reutilización de aguas pluviales y depuradas para consumos no potables, así como la separativa de pluviales en todas las nuevas áreas de desarrollo”.
Seguidamente, el director general de Coordinación de la Acción de Gobierno de la Generalitat valenciana, Juan Ángel Poyatos, expuso las claves de la estrategia valenciana de recuperación, en la que desgranó las líneas de actuación en torno a cinco grandes ejes estratégicos: empleo, conocimiento e investigación; resiliencia económica y transformación digital; transición ecológica y cohesión territorial; cuidado de las personas e inclusión social; y gobernanza regional y administración eficiente.
La segunda conferencia de esta tercera edición del Foro del Agua de Castellón, titulada El agua como palanca de recuperación, fue a cargo del director general de Facsa, Jose Claramonte, quien defendió el papel del agua como elemento esencial para el desarrollo socioeconómico y la necesidad de aportar todos los recursos necesarios para garantizar una gestión más eficiente de la misma y hacer frente a los retos que nos encaminen hacia un futuro sostenible.
En esta línea, tras una breve exposición de la situación hídrica de la provincia de Castellón, Claramonte puso de manifiesto la necesidad de invertir en investigación e innovación para aplicar las mejores técnicas disponibles: desde la digitalización hasta la implementación de nuevas tecnologías más eficientes y sostenibles en todos los procesos. También, la importancia de contar con un inventario de activos que favorezca la gestión patrimonial de las infraestructuras, así como la tan necesaria financiación para abordar toda esta transformación que nos permita mantener la calidad del servicio y la sostenibilidad del recurso.
Para finalizar la jornada, se celebró una mesa redonda en la que participaron, además de los ponentes Juan Ángel Poyatos y Jose Claramonte, los alcaldes de Peñíscola (Andrés Martínez), la Vall d’Uixó (Tania Baños) y Benicarló (Xaro Miralles), y el presidente de la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento, Fernando Morcillo. Todos ellos intercambiaron impresiones acerca de la sostenibilidad como eje de recuperación, la digitalización como un factor clave de presente y futuro, y la necesidad de la colaboración público-privada a la hora de alcanzar los objetivos de desarrollo marcados en la provincia.